Un camino DISFERENTE
Treinta 30 días para “curarse en salud” y encontrar EL CAMINO
Me acaban de diagnosticar una enfermedad que se ha manifestado recientemente. La peregrinación estaba programada de antemano, pero decido seguir con mi proyecto. Empiezo el camino consciente de que tengo una enfermedad, pero esto no me impide caminar. Yo no estoy enfermo, “tengo una enfermedad”. Mi ser más profundo está sano, como mis ganas de caminar, de hacer etapas, de aprender, de crecer, de llegar a la meta. Yo se que tomar conciencia de mi realidad me ayudará a afrontar mejor el camino, a superar dificultades etc…
Es inútil que niegue la evidencia. Si no hay aceptación no hay posibilidad de sanación. En la enfermedad es muy importante ponerse en proceso para ir sanando poco a poco el corazón y sus heridas, como paso previo para la sanación física que está en las manos del gran médico, el Padre Dios.
Testimonio: Es fácil encontrar en el camino grupos de peregrinos pertenecientes a alguna asociación relacionada con “la enfermedad” y a discapacidad (cardiopatías, cáncer, síndrome de Down, enfermedades raras etc…)
La mayor parte de ellos caminan con serenidad acogiendo su situación y con ganas de nuevas experiencias y retos. Ellos son un verdadero ejemplo para todos y encarnar el verdadero espíritu del camino que es “la sanación interior”.
Lema: «No necesitan médico los sanos, sino los enfermos. No he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores. (Marcos 2,17)
LUZ EN EL CAMINO CON NICK VUJICIC:
Nick Vujicic, nació el 4 de diciembre de 1982, en Australia, sin brazos ni piernas, debido al síndrome de tretra-amelia.
De niño sufrió las burlas y la discriminación de la sociedad, lo que lo llevó a intentar quitarse la vida. Sin embargo, las constantes frustraciones fueron un desafío para él, llevándolo a ver su propio potencial.
Actualmente Nick brinda charlas motivacionales por todo el planeta. Ha escrito diversos libros y es un referente de superación, optimismo y virtud.
Su fe cristiana (es evangélico) ha sido crucial en la vida de Nick Vujicic. Él afirma que a lo largo de su vida su fe a sido su escudo y su fortaleza, su fe en Dios, un Dios todopoderoso que siempre lo cuidó y lo ayudó en los momentos más oscuros de su vida, es por ello que, a dedicado una buen parte de su vida a predicar las buenas nuevas de salvación a las personas y ayudarlos a no caer ante la adversidad.
Tener una enfermedad es una oportunidad para mi vida. Nada sucede por casualidad todo es una causalidad de la que quiero aprovecharme. Mi debilidad me hace grande. Es una cátedra, un máster acelerado donde aprendo a vivir de verdad, colocando cada cosa en su sitio y revertiendo los valores que siempre consideré importantes.
"La vida está llena de dificultades. Pero hay dos maneras de mirar las dificultades: o lo miras “como algo que te bloquea, que te destruye y te detiene, o lo miras como una oportunidad. Te toca elegir” (Papa Francisco).
Todo en la vida depende de nuestra actitud. No quiero desaprovechar esta oportunidad. Incluso las cosas que aparentemente pueden parecer negativas o contrarias a mis expectativas, si las vivo como oportunidad me harán mejor persona, persona más plena para responder al proyecto de Dios sobre mi. Parece un contrasentido, pero no lo es.
Mi padre Dios no puede querer nada malo para mi…Como buen padre que es permite a veces que pasemos por situaciones difíciles, que pasemos por la escuela del dolor para que “adquiramos un corazón sensato” (Salmo 90,12).
Testimonio: Una peregrina enferma de cáncer comentó todo el proceso de su enfermedad y como pasado el rechazo inicial, el cabreo, el duelo etc… se dio cuenta del valor de la vida. Que no era debido levantarse por la mañana...sino que era un don y un regalo estar vivo. Empezó a apreciar y gozar las cosas pequeñas, los detalles y los encuentros-Se hizo más sensible al dolor de los demás, aprendiendo a tender la mano sin exigir nada, solo por la mera satisfacción de ayudar.
A ella la enfermedad le cambia la mirada y ya no es la misma persona.
Lema: “Cuando soy débil entonces soy fuerte” (2 Cor 12,10)
LUZ EN EL CAMINO CON DANIELA QARANTA:
Mi vida empezó en Méjico un 12 de noviembre.
Ese día mis padres se enteraban que iban a tener una hija con mielomeningocele, espina bífida e hidrocefalia y su vida cambiaría para siempre. Me bautizaron Daniela María Sofía. Esta es mi historia de vida y quiero compartirla con todos ustedes.
Mis padres, Alejandro y Claudia, hicieron y hacen todo lo que está a su alcance para que yo pueda tener la vida que tengo; plena y colmada de proyectos y metas por cumplir, a pesar de cualquier limitación.
Me crucé con personas más abiertas que otras, con gente que me discriminó y me excluyó de búsquedas laborales, y afortunadamente también con personas que creyeron en mí, en mis potenciales y me dieron oportunidades para demostrarlo. Agradezco haber vivido todas esas pruebas y haber atravesado todos esos obstáculos, porque sin duda, uno está donde debe estar. En el momento y lugar indicados.
Me encuentro viviendo una gran experiencia, la cual agradezco y aprovecho diariamente. Aprendo cada día un poco más gracias a la generosidad de los que me rodean y voy construyéndome como la futura profesional que algún día quiero llegar a ser.
La discapacidad para mí nunca fue una limitación ni una traba, al contrario. Siempre la tomé como un desafío. Como un desafío personal, que intento vencer a diario demostrándome que puedo y un desafío social, intentando con mi granito de arena, demostrarle a las demás personas y a los jóvenes con alguna discapacidad, que se puede, ¡siempre se puede!. Se trata de confiar en uno mismo y tener ganas de salir adelante.
A cada persona que se me cruza en el camino siempre le digo lo mismo, “si vine a este mundo, es porque mi misión es hacer algo, ser alguien, no me pienso quedar lamentándome por nada… al contrario, voy a vivir al máximo siempre”.
Cada día es una nueva oportunidad y no hay que dejarla pasar, nunca.
Muchas veces las personas que nos rodean, nos perciben con una mira compasiva ante la situación física que nos toca enfrentar… Es obligación nuestra como personas con discapacidad, demostrarles que están equivocados. Que no nos tienen que tener lástima ni mucho menos. Somos personas como cualquiera, con una vida un poco diferente pero con las mismas ganas de vivir y de progresar que cualquiera de nuestra misma edad.
La clave está en no dejarlo de intentar jamás.
Y esta es mi vida, una oportunidad diaria de ir hacia adelante, rodeada de una gran familia que siempre me brindó su apoyo y acompañó incondicionalmente, y motivada por unas incansables ganas de no quedarme nunca estancada, apostando siempre a ir por más.
Me doy cuenta que se puede vivir y realmente estar muerto. Estamos “muertos” cuando no tenemos horizonte, cuando no hay ilusión, cuando hemos perdido la esperanza.
Por eso es tan importante tener vida hacia dentro. Este potencial interior nos ayudará a sobrellevar cualquier adversidad porque tendremos energía suficiente para encarnarlas.
Desde mi enfermedad incipiente pienso que estar activos interiormente a todos los niveles es una plataforma de sanación que va más allá de nuestra sanación física…la vida dentro nos sana interiormente y nos ayuda a seguir adelante a pesar de las piedras del camino.
No quiero dejarme llevar por la queja, perder tiempo regodeándome en “mis desgracias”, quiero mirar hacia delante, al futuro que viene con esperanza y confiando.
Cuantas veces llevamos dentro heridas profundas, que no acaban de cicatrizar: experiencias duras, negativas, frustrantes que nos cortan las alas, y son una pesada carga para sobrellevar.
Dios es fuente de sanación y cargas nuestras pilas interiores con su amor de Padre…, un amor que sana, rejuvenece, nos hace nuevos. Adelante, siempre adelante acogiendo lo que viene por el camino de la vida.
“El peregrino entra dentro de sí mismo para dar sentido a su peregrinar en el espacio y en el tiempo, sabiéndose necesitado de salvación y buscado por Dios” ( Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Julián Barrio Barrio -Arzobispo de Santiago de Compostela)
Lema: “Dios hace nuevas todas las cosas” (Ap 21,5)
LUZ EN EL CAMINO CON NICKOLE CHERON:
En el 2008, una inusual tormenta invernal dejó a Portland, en Oregón, EEUU, bajo más de un metro de nieve. La ciudad estaba paralizada. Nickole Cheron estuvo atrapada en su casa por ocho días. Muchas personas lo considerarían sólo un inconveniente; para Nickole, cuyos músculos están muy débiles para soportar su cuerpo, esos ocho días pusieron, potencialmente, su vida en peligro.
Nacida con atrofia muscular espinal, una enfermedad genética que progresivamente debilita los músculos del cuerpo, Nickole depende por completo de una silla de ruedas y de personas que la cuidan tiempo completo y la ayudan en la mayoría de sus tareas cotidianas. Estar sola por ocho días no era una opción. Por esa razón, Nickole se inscribió en “Ready Now!,” un programa de capacitación para la preparación para emergencias creado a través de la Oficina de Discapacidades y Salud de Oregón.
“Lo más importante que aprendí de ‘Ready Now!’ fue que se debe tener un plan alternativo en caso de una situación de emergencia”, dijo. “Cuando escuché que venía la tormenta de nieve, les mandé correos electrónicos a todas las personas que me cuidan para saber quién vivía cerca y estaría disponible. Me aseguré de tener un generador, baterías para mi silla de ruedas y suministros de alimentos, agua y medicinas recetadas para por lo menos una semana”, agregó.
Nickole dijo que la
capacitación le dio poder y reforzó su capacidad de vivir de manera
independiente aunque tenga una discapacidad. Se sintió mejor informada acerca
de los posibles riesgos que las personas con discapacidades pueden enfrentar
durante un desastre. Por ejemplo, podría ser que las clínicas cerraran, las
calles y aceras estuvieran intransitables o que los cuidadores no pudieran
trasladarse.
Entre los consejos que Nickole aprendió de la capacitación “Ready Now!” de
Oregón están:
“Esta capacitación les muestra a las personas con discapacidades que ellas, mejor que nadie, pueden hacer lo necesario para priorizar su situación durante una crisis,” dijo Nickole. “‘Ready Now!’ anima a las personas con discapacidades a hacerse cargo de su propio cuidado”, afirmó.
Es importante conocernos y reconocernos como realmente somos. Me miro y me veo como una obra maravillosa salida de la mano de Dios. Dios me ama como soy, con mis capacidades y discapacidades, con mi enfermedad, mi presente y mi futuro.
Al mirarme descubro que Dios me miró desde siempre con amor y al crearme “Vio Dios lo que había hecho y se dio cuenta que todo era bueno”(Gn 1,31)
Miro mi vida en positivo y mi disferencia sin amarguras, sin frustraciones.
“Jesús miró a Mateo. Qué fuerza de amor tuvo la mirada de Jesús para movilizar a Mateo como lo hizo; qué fuerza han de haber tenido esos ojos para levantarlo”, “lo miró sin prisa, con paz. Lo miró con ojos de misericordia; lo miró como nadie lo había mirado antes. Y esta mirada abrió su corazón, lo hizo libre” porque el amor de Jesús “nos precede, su mirada se adelanta a nuestra necesidad. Él sabe ver más allá de las apariencias, más allá del pecado, del fracaso o de la indignidad” (SS Papa Francisco -21 septiembre 2015).
Una cosa es cierta, ser optimista y positivo es el mejor camino para superar problemas más eficazmente. Nuestros pensamientos, nuestros sentimientos y nuestras acciones van e la mano. Si pensamos en positivo, crearemos sentimientos positivos que nos llevarán a acciones positivas y la unión intrínseca de estos tres factores nos llevará a una acción con mayores probabilidades de éxito.
El optimista ve lo bueno en lo malo, la luz en la oscuridad. No es ingenuo o iluso, todo lo contrario. Ser optimista no es nada fácil.
Intento no subestimar la capacidad de poder pensar en positivo y te animo a ello. Si posees esta habilidad, utilízala. Si crees que no la posees, fórmate en ella, todos podemos aprender a ver la vida con una mirada positiva. Si solo no puedes, pide ayuda. Está claro que es de locos intentar una y otra vez ser de una manera que no somos. Eso está condenado al fracaso, salvo mínimas excepciones que con fuerza de voluntad lo han logrado. En otros casos hay que aprender incluso a generar esta fuerza de voluntad para empezar el cambio.
Lema: Saber mirar es saber amar (De la película Canción de cuna Director José Luis Garci 1994)
LUZ EN EL CAMINO CON ALEX ZANARDI
Alex Zanardi nació el 23 de octubre de 1966, en Bolonia, Italia.
El expiloto de Fórmula 1 perdió sus piernas en 2001 tras estar cuatro días en coma al ser arrollado en una brutal colisión a 330 km/h en el circuito Lausitzring.
Alessandro encontró en el ciclismo de mano un nuevo camino que le permitió volver a ilusionarse en la vida y subir, hasta en cuatro ocasiones, al primer cajón del podio en los JJOO paralímpicos de Londres 2012 y Río de Janeiro 2016.
Lejos de todo lo pensado, el deportista nunca se rindió; su pasión fue más fuerte que su condición y continuó haciendo lo que amaba.
El 19 de junio de 2020, se estrelló con su ‘handbike’ contra un camión durante una competición de relevos en Toscana; sigue su reahabilitación en el hospital de Padua animado por su familia, especialemente de su hijo; de muchos de sus seguidores y del Papa Francisco que le ha enviado esta emotiva carta de consuelo y fortaleza.
"Querido Alessandro. Su historia es un ejemplo de cómo volver a comenzar después de una parada repentina. A través del deporte nos enseñó a vivir la vida como protagonistas, haciendo de la discapacidad una lección de humanidad. Gracias por dar fuerzas a quienes la tuvieron. En este momento tan doloroso, estoy cerca de ti. Oro por ti y tu familia. Que el Señor te bendiga y nuestra señora te proteja. Fraternalmente, Francisco".
Tomo conciencia que lo disferente en mi, es paradójicamente una oportunidad y una riqueza. Tengo una enfermedad que si la vivo bien me enriquece, abre mis ojos, me hace más sensible y cercano, más humilde y servicial, más necesitado de ayuda y más capaz de acogerla.
Lo disferente en mi no me hace ni mejor ni peor que los demás, simplemente me distingue y me compromete a aportar lo mejor de mi a los demás que es mucho.
El mundo actual necesita personas que acojan su disferencia para juntos hacer un mundo mejor donde las disferencia sea la normalidad. Todos iguales, todos diferentes...todos seres humanos capaces de enriquecernos unos a otros.
Yo no soy ciudadano inferior porque no hay ciudadanos de primera y de segunda, clase A y clase B….
La enfermedad y la diferencia nos dan miedo y tendemos a etiquetar y excluir.
Pero yo pienso que todos somos personas llamadas a ser felices y a construir una nueva civilización donde las diferencias sean leídas como riquezas y no como motivos de exclusión y marginación.
No me siento excluido por estar enfermo, simplemente tengo un motivo más en mi vida para la superación y que sin duda puede sacar de mi mejor yo.
Lema: Querer es poder
LUZ EN EL CAMINO CON JERRY
Jerry tiene cuatro hijos. Es independiente, tiene una casa, formó una familia y sus hijos adultos todavía acuden a él en busca de apoyo. Jerry se jubiló de programador informático en el 2009 y compite y entrena a otros en varios deportes. Esta persona que lleva una vida normal y saludable hasta ha participado en la maratón de Boston.
Jerry también ha tenido una discapacidad desde hace más de 40 años, ya que, el 3 de diciembre de 1976 (el mismo día en que se conmemora el Día Internacional de las Personas con Discapacidades) a Jerry lo atropelló un conductor embriagado. El accidente lo dejó parcialmente parapléjico.
A la vida de Jerry no la define su discapacidad. Él vive su vida al igual que las personas que no tienen una discapacidad: “Hay mucho que puedo hacer y hay ciertas cosas que no”; “Manejo, invierto dinero. No soy rico, pero tampoco pobre. Me gusta estar sano y ser independiente”, dice de sí mismo.
Sin embargo, como
persona con una discapacidad, Jerry ha enfrentado muchas barreras: Una vez lo
estaban preparando para una operación cuando una enfermera dijo: “No necesita
una epidural, es parapléjico”. Jerry le tuvo que informar a la enfermera que
solo era parcialmente parapléjico y que definitivamente necesitaría una
epidural.
Jerry estaba en la fila en un tribunal de Alabama para renovar su permiso de
estacionamiento y también renovar el registro del auto de su hijo. Vio cómo un
trabajador se acercaba a las personas en la fila y les preguntaba qué
necesitaban. Cuando llegó a donde estaba Jerry y vio la silla de ruedas, le
preguntó: “¿Usted con quién vino hasta aquí?”.
Jerry ha visto muchos obstáculos y actitudes negativas hacia las personas con discapacidades que, todavía existen. Aunque también ha notado muchos cambios positivos para lograr que las personas con discapacidades se mantengan físicamente activas mediante oportunidades recreativas y organizaciones que proporcionan oportunidades.
Jerry expresa lo siguiente: “No espero que el mundo gire alrededor de mí. Me adaptaré, solo necesito que las cosas se hagan de manera en que yo pueda adaptarme”.
La vida es un camino y todos somos peregrinos. El ser humano es peregrino por naturaleza. Estoy hecho para caminar y mi vida es camino.
“El fenómeno de las peregrinaciones está presente en todas las culturas y religiones desde los comienzos de la civilización humana. Es un fenómeno indisolublemente unido a la condición itinerante del hombre. Nuestra vida, según han defendido numerosos literatos y filósofos a través de la utilización de esta metáfora viaria, no es más que el largo camino, lleno de vericuetos y encrucijadas, que transcurre entre el nacimiento y la muerte. Existe, por tanto, un fuerte componente antropológico en el peregrinar del hombre sobre la tierra… El camino no es sólo una condición pasajera, un estar ocasional, sino el modo de ser característico del hombre” (DR. MARCELINO AGÍS VILLAVERDE U.S.C.)
Yo con mi enfermedad, tu con tu bagaje de heridas, experiencias y esperanzas necesitamos ponernos en camino cada día, desde que nos levantamos hasta el final de nuestro día. Caminar siempre, mirando hacia delante, con la esperanza puesta en las cosas maravillosas que me faltan por vivir.
Dicen algunos que la “vida son cuatro días”, pero esos cuatro días hay que vivirles con intensidad, gustando cada momento, cada segundo, paladeando el tiempo de que disponemos para vivir profundamente.
El tiempo es nuestro aliado, lo único que tenemos y lo más grande que podemos ofrecer y regalar.
“Quien camina con Dios camina alegre” ( San Luis Guanella)
En el camino el tiempo puede dar para mucho: tiempo para la fatiga, la superación, las emociones, las sensaciones, los encuentros, la reflexión, el silencio, la sorpresa, la contemplación, la amistad .Hay tiempo para dejarse amar por Dios que camina a nuestro lado prácticamente perceptible desde la superficialidad ...pero muy presente si sabemos pararnos y mirarnos por dentro.
Lema: Se hace camino al andar.
LUZ EN EL CAMINO CON SUHANA
Suhana tiene una hermana, Shahrine, que es 18 meses mayor que ella. Cuando la madre de Shahrine estaba embarazada de Suhana, un tío llegó de visita. Durante la visita, el tío notó rápidamente que Shahrine no parecía hablar a un nivel apropiado a su edad, ni respondía cuando la llamaban. Shahrine también subía el volumen de la televisión y la radio cuando los otros podían escucharlas sin dificultad. Los padres de Shahrine pensaban que su desarrollo del habla y su conducta eran normales para una niña pequeña, pero gracias a que el tío expresó sus preocupaciones la familia pronto tomó medidas. Una prueba de audición encontró que Shahrine tenía dificultades auditivas.
Debido al diagnóstico de
Shahrine, a Suhana se le hizo una prueba de la audición al nacer y se encontró
que también tenía dificultades auditivas. Si no hubiese sido por las
preocupaciones expresadas por el tío de las niñas, no solo la pérdida auditiva
de Shahrine podría haber seguido por más tiempo sin detectarse, sino que
probablemente no se le habría hecho una prueba de audición a Suhana al nacer.
Como consecuencia del diagnóstico temprano, los padres de Suhana y Shahrine
pudieron adquirir los conocimientos necesarios para asegurarse de que sus hijas
pudieran alcanzar su potencial máximo en la vida. Tuvieron acceso en una etapa
temprana a servicios provistos por un equipo de médicos, terapeutas del habla,
consejeros y maestros.
Suhana da gracias a sus padres por sus propios éxitos, y dice que no hubiera podido llegar tan lejos sin su apoyo y paciencia.
Cuando los niños que son sordos o tienen dificultades para oír reciben servicios en una etapa temprana, tienen más probabilidades de alcanzar todo su potencial y vivir una vida adulta saludable y productiva.
El camino de Santiago es un camino hacia dentro más que un camino de piernas exclusivamente. Es un viaje interior hacia el epicentro de nuestro ser para tomar nuestra vida en la mano, descubrir de donde venimos, hacia donde vamos, con quien viajamos y ver la obra de Dios en nosotros.
Si el camino es solo “de piernas” no seremos peregrinos, tan solo caminantes y aunque esto no está mal y es posible ,,,se queda solo a la mitad del verdadero sentido del camino.
"En los momentos de tristeza, poca o mucha, en los momentos oscuros: oración, paciencia y esperanza. No olvidéis esto”.Papa Francisco
El camino no es una aventura más tipo Indiana Jones, Es una experiencia de vida que me pone al descubierto, me desnuda interiormente, quizás me deje en cierto modo a la intemperie, pero siempre me lleva a lo mejor de mi mismo allí donde Dios habita, me espera y me quiere.
Hacer el camino de Santiago es permitirle a Dios que se haga el encontradizo, que nos hable al corazón y nos indique cual es su sueño sobre nosotros. Descubrir ese sueño, es encontrar la clave de la felicidad, pero para todo ello es fundamental hacer silencio interior.
Lema: La paciencia todo lo alcanza.
LUZ EN EL CAMINO CON LA FUNDACIÓN SOR ANGELA DE LA CRUZ
El Centro Santa Angela de la Cruz es una realidad gracias a la inquietud de muchos padres y madres de niños y niñas sordociegas en España. También se implica en esta Fundación el Arzobispado de Sevilla junto a otras instituciones civiles, tanto públicas como privadas.
Los primeros pasos se pudieron dar gracias a la generosidad de la Asociación Paz y Bien, de Sevilla, que renunció en favor nuestro a la finca conocida como “El Almuédano”, situada en el término municipal de Salteras, provincia de Sevilla. La finca es propiedad del Arzobispado de Sevilla, que nos lo cedió para su transformación en Centro Residencial para Sordociegos. Tiene una superficie de 5.400 m2.
El proyecto inicial partía de una adaptación del edificio para admitir 25 jóvenes sordociegos, 15 internos y 10 externos. El criterio de admisión incluye a jóvenes con discapacidad auditiva o visual con dificultades añadidas. Y la capacidad se amplía a un total máximo de 45 usuarios: 28 en Unidad de Día y 17 en Unidad Residencial.
El Centro quedaba acreditado para su apertura a mediados de septiembre de 2010, iniciando a final de mes su actividad como centro residencial y centro de día. El 26 de octubre 2010 fue inaugurado oficialmente por Su Majestad la Reina Sofía.
Este Centro se ha podido construir con la ayuda de las administraciones, y con el esfuerzo de muchos.
Las caídas forman parte de la vida, de este camino nada fácil pero que merece la pena vivir.
Todo tiene un comienzo, un principio, un inicio de camino.
Empecé de una manera y ahora estoy de otra…yo también voy haciendo camino más de corazón que de piernas…
Mantengo la esperanza puesta en unos pasos inciertos pero fuertes, buscando un destino, un horizonte luminoso que colme de gracias. Un guiño acertado, una salida airosa, una sonrisa a tiempo y una visión en tu corazón para hacer realidad aquello que soñaste.
Preparativos, organización, disciplina y arranque para dar volumen a este proyecto nuevo, a esta nueva andadura que pretende navegar a todo trapo, sin oposición alguna. No hay temporal que te detenga, todo es propósito y buenas intenciones, deseos e ímpetu indomable. El comienzo es prometedor y pones todo tu empeño en ello.
El rostro ilumina tu senda, enfocando tu objetivo, conociendo a personas válidas, cargando tu mochila de palmadas amables y gestos extraños. Despedidas y gestas, misiones audaces e intrépidas que ponen los cimientos de una muralla infranqueable, de una ilusión esperada. No hay peros y tu entusiasmo te lleva en volandas en pos de tus logros. El comienzo es prometedor.
Pero el camino es traicionero y los socavones te esperan, es seguro.
Y llega la oscuridad, el fracaso, las lágrimas y ese temporal que hace zozobrar tu nave. Intentas achicar los problemas pero las grietas son extremas y te es imposible. Te abandonas a la deriva, dejándote llevar por esa furia sobrevenida, por ese temporal no planeado que ha dado al traste con tus planes. Te sientes vacío.
Todo es negro, el sentimiento de inutilidad es extremo, el aburrimiento consume tus vacíos y nada te llena, excepto lamentarte y autocompadecerte. Aquel comienzo luminoso se ha quebrado en mil pedazos de carbón gélido, hiel que amarga la existencia de tus pasos. Nada te sale, todo te estorban, nada ves, todo es inútil.
Pero un día te das cuenta que tras una caída, toca levantarse. No puedes seguir así, no debes ahogarte en lamentos vanos. Te sacudes con fuerza el lastre de tus hombros y te pones manos a la obra, acumulando energía, vislumbrando paisajes nuevos y renovados, descubriendo horizontes inexplorados y sintiéndote con ganas de seguir caminando. La vida sigue y quiere seguir sintiéndola, quieres montarte en ella.
Nuevos proyectos, aún con más ahínco, renuevas fortalezas y ambiciones, zapatos y sonrisas, para ofrecer al mundo otra cara, otra faceta de entusiasmo y otro comienzo, otro castillo, otra muralla que flanquear. Es distinta tu actitud, te has descubierto en la adversidad, te has adaptado al cambio y deseas seguir compitiendo, mostrando lo que sabes hacer, lo que puedes y debes construir. Eres único.
Y sí, esta vez sí consigues llegar, henchido de orgullo por lo pasado, por lo soportado y vendido. Has pedido cuentas a la vida y ésta no ha mirado atrás pues los caminos tienen víctimas conformistas que no aceptan lo que les tocan vivir. El sendero está lleno de aventureros que cayeron y no consiguieron levantarse, que no supieron vivir con la derrota ni con la frustración de los finales.
Lema: “Levántate, coge tu camilla y vete a ti casa” (Mc 2,11)
LUZ EN EL CAMINO CON HELEN KELLER
Helen Keller nació el 27 de junio de 1880, en Alabama, Estados Unidos. Una intensa enfermedad la dejó sorda y ciega desde pequeña. Gracias a su maestra Anne Sullivan, Helen aprendió a leer y a comunicarse. Anne pudo enseñar a Helen a pensar inteligiblemente y a hablar, usando el método Tadoma: tocando los labios de otros mientras hablan, sintiendo las vibraciones, y deletreando los caracteres alfabéticos en la palma de la mano de Helen. También aprendió a leer francés, alemán, griego, y latín en braille.
Helen no se desanimaba fácilmente. Pronto comenzó a descubrir el mundo usando sus otros sentidos. De adulta, escribió libros y brindó charlas y discursos acerca de cómo superó los escollos que la afectaron de niña.
En uno de sus últimos escritos más memorables, redactado justo días antes de morir, citó: “En estos oscuros y silenciosos años, Dios ha estado utilizando mi vida para un propósito que no conozco, pero un día lo entenderé y entonces estaré satisfecha”. (pertenecía a la religión anglicana)
No somos turistas de la fe, somos peregrinos de la fe, y eso significa tener siempre presente la meta a la cual tenemos que llegar, Cristo, de donde viene la Luz y la Fuerza para ir superándonos en el día a día.
El Camino de Santiago no es una ruta turística, no debemos consentir que se convierta en eso. La peregrinación a Santiago es espiritualmente religiosa, donde buscamos el reencuentro con Dios en Cristo.
También yo soy peregrino, a pesar de mi enfermedad.
Voy peregrinando por el camino de la aceptación, de la acogida de mi realidad y tengo los ojos puestos en la meta que me espera.
¿Cuándo eres verdaderamente peregrino? Una persona que se pone en camino no es inmediatamente “peregrino”, lo es cuando sale y se incorpora personalmente y espiritualmente al camino; cuando se va dejando dominar, ganar, configurar cada vez más por el deseo de la meta. Ahora bien, si llevas contigo todas las comodidades, todas las relaciones, todas las dependencias del lugar de origen, como las de tu propia casa, entonces no eres verdaderamente peregrino.
El peregrino es el que sale en busca de una meta determinada. El hombre no nace en la plenitud de su ser. Por eso la llamada a la peregrinación le ayuda a salir hacia metas nuevas y mejores. Salir desde donde uno está para llegar a algo mejor… para llegar a ser mejor.
Siempre buscamos las mejores preguntas, las mejores soluciones, el mejor camino para llegar a ellas. Buscamos conseguir cosas, ser mejor, ser victorioso, ser sensato o ser útil. Queremos como meta el ser buenos trabajadores, el ser una buena madre o buen padre, llegar a ser un buen amigo, vecino, hermano o hermana. A caso no has pensado o preguntado “¿Cómo llegar a ser lo mejor que somos?
Lema: Dos caminos tienes…
LUZ EN EL CAMINO CON JULIO CUESTA MISIONERO DE DON ORIONE
El misionero dice que tiene “sólo” 75 años (2020) y presume de origen burgalés del partido judicial de Villadiego. Es uno de los 11.000 misioneros españoles por los que Obras Misionales Pontificias (OMP) alza la voz en la jornada del Domund.
El Covid-19 también se ha sentido en el Cottolengo Filipino donde este misionero, de la Pequeña Obra de la Divina Providencia fundada por San Luis Orione, trabaja los siete días de la semana. Allí atiende a menores abandonados por sus familias y que tienen distintas discapacidades físicas y psíquicas.
“Son 40 en régimen de internado. Es un centro del tipo del ‘Hogar Don Orione’ de Pozuelo de Alarcón (Madrid), con la diferencia que aquí no tenemos ninguna ayuda del Gobierno”, compara.
“Todos tienen discapacidad intelectual severa y casi la mitad de ellos parálisis cerebral. Tenemos estos casos de discapacidad: síndrome Down, autismo, hiperactividad (algunos de ellos muy difíciles de cuidar), ceguera (cinco niños), hidrocefalia, microcefalia, epilepsia… La gran mayoría no pueden hablar. Todos han sido abandonados por sus familias (en la calle, en hospitales, a la puerta del ‘cottolengo’). Al no hablar, de algunos no sabemos ni su propio nombre, ni la edad”, subraya el religioso.
“El Gobierno filipino no ayuda nada a las familias con hijos con discapacidad. Además, los niños del ‘cottolengo’ necesitan medicinas que son más caras aquí que en España, visitas a especialistas y hospitales y un cuidado continuo, lo que es imposible de soportar para muchísimas familias. No tienen otro remedio que abandonarlos”, lamenta. “Los cuidamos con cariño y calidad hasta el final” -dice- a la par que muestra su impotencia por no poder responder a todas las solicitudes que les llegan.
Por eso, la congregación trata de construir un pabellón para 20 niñas: “El coronavirus nos ha obligado a posponer este sueño. Nos dio tiempo sólo a poner el cartel ‘Aquí surgirá el pabellón femenino del Cottolengo’ y estábamos a punto de empezar a buscar la ayuda necesaria para la construcción cuando irrumpió la pandemia. Dios dirá en qué va a quedar este sueño”.
Asegura que, en su vida, “el servicio a los pobres ha sido siempre un honor, un privilegio”, a lo que añade “una fuente de una profunda alegría”. “Todo esto es muy lógico, no podría ser de otra forma, cuando conoces y crees en la dignidad fundamental de toda persona, independientemente de su salud física, de su poder económico, etcétera. Y, es más, cuando estás convencido del amor especial de parte de Dios hacia estas personas”, agrega.
“Yo veo siempre a estos niños del ‘cottolengo’, para los que vivo, como personas que nos ha enviado Dios para que los cuidemos en su nombre y me esfuerzo de hacerlo del mejor modo posible, sin ahorrar tiempo ni energías”. (Entrevista en Servimedia 18-10-2020)
Del mismo modo que antes de iniciar el camino necesito prepararme con un tiempo de entrenamiento, también mi corazón necesita prepararse con ejercicios de ánimo, de optimismo, de fortaleza, de esperanza. Me puede llegar el desanimo ante la empresa que voy a iniciar y corro el riesgo de abrumarme ante la incertidumbre sobre lo que será.
Me digo a mi mismo reiteradamente que “puedo”, que lo voy a hacer, que me lanzo a la aventura con la certeza que no estoy solo y que seré capaz de superar cualquier obstáculo si creo en mis posibilidades y capacidades.
Todos los días me pongo delante del espejo y me veo capaz, fuerte y con afán de superación.
Ante los agoreros que pueden vaticinarme escaso éxito, yo les planto cara y voy entrenándome en la certeza que “para el que quiere, todo se puede”.
Quizá tenga días que el propio entrenamiento me canse y me fatigue, lo mismo que me cansará el camino, eso forma parte de la normalidad, lo importante es no caer en la desesperación y en el fatalismo.
Lema: Yo quiero, yo puedo y lo lograré.
LUZ EN EL CAMINO CON LA CONGREGACIÓN HERMANITAS DISCÍPULAS DEL CORDERO
En los años 80, Line, una mujer francesa con vocación religiosa, conoció a Vèronique, una adolescente con síndrome de Down-. Ambas querían formar parte de una congregación religiosa, pero Vèronique no era admitida en ninguna de ellas. Entonces, Line se vió obligada a intentar ayudar a su compañera y tuvo la idea de fundar su propia congregación. El camino no fue fácil, a pesar de la fe que las dos amigas profesaban. Encontraron muchas trabas hasta que consiguieron fundar la comunidad de las Hermanitas Discípulas del Cordero, con el apoyo de un pediatra que investigaba el síndrome de Down, Jerome Lejeune.
En 1990, las Hermanas solicitaron al arzobispo de Tours el reconocimiento como asociación pública de fieles laicos. Una vez reconocida tras 14 años de lucha y esfuerzo, la comunidad se instaló en Le Blanc para seguir, según afirman, el camino de Santa Teresa de Lisieux.
«Nací con Síndrome de Down. Soy feliz, amo la vida y rezo. Es mi mayor alegría, ser la esposa de Jesús», afirma Véronique.
Para caminar necesito un buen calzado, uno que sea fuerte, que se adhiera al terreno, que no esté demasiado nuevo etc…
Si no llevo buenas botas me voy a machacar los pies y llevar los pies machacados no es lo mejor para mi salud.
Si, en el camino te puedes poner las botas de muchas cosas…
Las botas de una experiencia que te marcará interiormente
Las botas de naturaleza increíble
Las botas de arte y cultura.
Las botas de una gastronomía que roza ”lo divino”
Necesito las botas de la fe para que no se me claven las piedras del camino.
En el camino de la vida hay senderos lisos y cómodos que permiten disfrutar “a tope”, y hay otros escarpados y duros. Con buenas botas nada se me resiste.
Necesito las botas de la confianza en mi mismo y en mi capacidad de superación.
Necesito las botas de la serenidad para vivir las sorpresas que me da la vida y la enfermedad.
Necesito las botas de la valentía para acoger lo que venga sin desesperarme.
Confío en que seré capaz.
Lema: Me pongo las botas de caminar o bien caminar es rezar con los pies
LUZ EN EL CAMINO CON PAI MENNI Y LA QUINTA DEL ARTE
En PAI MENNI estamos comprometidos en potenciar nuestras alianzas con el entorno, estableciendo colaboraciones que sin duda aportan valor a todas las partes, y en especial, a las personas usuarias de PAI MENNI, por ello, nuestro agradecimiento a todas las colaboraciones recibidas y nuestras puertas abiertas a seguir construyendo futuro conjuntamente: ¡GRACIAS!
“Trabajar dando el taller de teatro en vuestro centro me ha supuesto mucha satisfaccion por varios motivos: la facilidad en todo, la confianza depositada en nosotros y la buena coordinación y trato recibido por vosotros durante todo el proceso; en concreto por parte de las alumnas nos hemos sentido queridos y valorados. Los miércoles eran días especiales donde los afectos y las emociones se podían expresar y donde el juego se podía desarrollar en un ambiente de confianza y familiaridad” (Victoria Teijeiro . La Quinta del Arte)
La Quinta del Arte es una asociación cultural especializada en teatro inclusivo y con sede en A Coruña.
Creamos La Quinta del Arte con la esperanza de que fuese una plataforma temporal, confiando que dentro de un tiempo no sea necesario el término “teatro inclusivo” sino que cualquier persona pueda ir a un taller teatral sabiendo que está abierto a la sociedad en general.
Realizamos talleres y espectáculos teatrales para personas con y sin discapacidad entendiendo que el proceso creativo favorece la inclusión social.
Entendemos que todos tenemos diversidad funcional pues TOD@S SOMOS DIFERENTES.
Sigo mi camino con esperanza y me doy cuenta lo importante que es la mirada…en la mirada nos lo jugamos todo, porque como dice el refrán popular “nada es verdad ni es mentira, todo es según el color del ojo con que se mira”.
Miro a mi alrededor, la casa donde vivo, la oficina donde trabajo, la clase donde estudio, la calle que cruzo, los coches que pasan, el teléfono que suena, la lluvia que cae, la luz que me alumbra… y descubro que todas las cosas tienen tu rastro y tu huella para el que sabe mirar. Al mirarlas con tus ojos me devuelven el destello, la novedad, la sorpresa, el saber que están ahí, porque Alguien las puso para mí. Unas tienen el polvo de los años, otras el brillo del cuidado… muchas soportan el descuido de quien, llevado por las prisas, apenas si se fija en su existencia. Pero todas ellas permanecen, fiel y obedientes a la mano que así las hizo… Una inmensa polifonía de cosas, de ruidos y silencios canta a su creador, ante mi frecuente sordera y mi constante ceguera.
En mi yo más profundo, ante la sola mirada Tuya, transcurre de forma silenciosa un río inmenso de voces, gritos, sonrisas, anhelos, pasiones, silencios, deseos, recuerdos. Todos ellos son el eco o la huella que lo vivido va dejando en mi alma. Hilos ocultos con los que se va tejiendo mi historia, la película de mi vida… He de pararme ante ellos, recoger su balance y enterrar el miedo o la confusión que, por momentos, me producen en la gran ternura con que Dios los mira.
Al llegar el sábado entró en la sinagoga y se puso a enseñarles…Había precisamente en la sinagoga un hombre poseído por un espíritu inmundo, que se puso a gritar: ¿qué tenemos nosotros contigo, Jesús de Nazaret?,¿Has venido a destruirnos? Sé quien eres tú: el Santo de Dios. Jesús entonces le conminó diciendo: cállate y sal de él. Y agitándole violentamente el espíritu inmundo, dio un fuerte grito y salió de él. (Mc 1, 21-25)
Mundo en el que no solo se mueven capitales de un lado a otro, sino imágenes…, ojos que diariamente se cuelan en nuestra vida, gritando, pidiendo, exigiendo, reclamando... ¿Cómo no pasar de largo? ¿Cómo mantener los ojos abiertos? ¿Cómo impedir que la mirada se embote cerrando la puerta a la compasión que quiere detener su camino y agachándose, levantar al que yace en los bordes de la vida? Sólo en una mirada como la de Dios, siempre volcada hacia el necesitado, se libra el abismo que el sufrimiento la injusticia abren entre los hombres…
Lema: “Dios me mira con amor…” (San Luis Guanella)
LUZ EN EL CAMINO CON LA CASA DE SANTA TERESA (GUANELIANAS)
Casa Santa Teresa es un centro perteneciente a la Congregación de las Hijas de Santa María de la Providencia y está concertado con la Comunidad de Madrid. A Través de sus servicios de Centro Ocupacional y Casas-Familia tiene como misión ofrecer a las perdonas adultas con “capacidades diferentes” los apoyos necesarios para normalizar su vida y alcanzar, en la medida de lo posibles, una progresiva integración sociolaboral.
Cuenta con tres casas-familia: Casa Clara. Casa Lidia y Casa Marcelina. La finalidad de una Casa-Familia es ofrecer un auténtico Hogar donde las chicas y chicos puedan vivir una vida normalizada en un ambiente de serenidad y con la mayor autonomía posible; con sus quehaceres y responsabilidades. Un espacio para aprender a relacionarse entre sí, a aceptarse tal y como son, a cuidarse a sí mismos y a su entorno, a manejarse con mayor soltura en la vida cotidiana….
“La voluntad de Dios ha sido siempre la pregunta constante a la que dar respuesta. En el fondo de mi corazón sabía que sólo cumpliéndola iba a ser feliz. Hubo un tiempo en el que viví la llamada casi como una “desgracia” porque sentía que el Señor era exigente y seguirle no iba a ser fácil conociéndome (menudo genio tenía yo…) Poco a poco fui descubriendo la preciosidad de ser llamada a la vida consagrada en la familia fundada por Don Guanella. Después de todos estos años me siento privilegiada por ofrecer mi vida al Señor en el servicio a los más pobres y necesitados.” Sor Sara Sánchez
Cada uno de nosotros soporta en su espalda el peso de las situaciones vividas en forma de mochila emocional. Su contenido son recuerdos y experiencias de diferentes tamaños que de alguna manera no hemos soltado y quedan reflejados en nuestra piel.
Descargo mi mochila para poder más tarde cargarla de experiencias positivas, sueños, proyectos y esperanzas.
Si no aprendemos a vaciar nuestra mochila de las experiencias tóxicas y negativas, cuanto más tiempo pase más cargada estará y mayor peso tendremos que soportar, repercutiendo en nuestro estado de ánimo y relaciones.
Llevar a cuestas nuestra mochila emocional sin sacar de vez en cuando lo que llevamos dentro genera heridas emocionales que son importantes sanar
En el mundo actual tendemos a sobrecargarnos, no solo a nivel laboral sino también emocional. Cada experiencia que vivimos deja huella de una u otra manera. Lo importante es que esta huella nos sirva para impulsarnos y crecer en lugar de generar cadenas que nos aten al pasado por su peso emocional.
No es lo mismo avanzar con heridas emocionales que se abren y duelen que con heridas que han sido sanadas y nos han proporcionado una oportunidad de aprendizaje.
Lema: Mira hacia delante y camina.
LUZ EN EL CAMINO CON GENNET CORCUERA
Hace más de 30 años que Gennet dejó su Etiopía natal (1980) en busca de una nueva vida en España, primero en Madrid, donde se formó en el Centro de Recursos Educativos de la ONCE, y desde hace tres años en Sevilla, donde trabaja en el Centro residencial de Aspadice en la localidad de Salteras PERTENECIENTE A LA ASOCIACIÓN SOR ÁNGELA DE LA CRUZ. Allí ejerce como monitora de dos talleres de estimulación sensorial y de lectoescritura enseñando braille a personas sordociegas como ella y enseñándoles a afrontar la vida con tranquilidad sin las tensiones que genera un grado de dependencia tan alto como el que provoca esta doble limitación personal.
Hasta los cuatro años no descubrió su entidad como persona sorda. Gennet Corcuera nació sorda y al poco tiempo se quedó ciega. A los tres años su familia desapareció y el orfanato de la Madre Teresa de Calcuta le acogió. “Esa misma monja fue profesora mía en ese orfanato”, cuenta con una rápida expresión de sus manos que interpreta su mediadora. “Me acuerdo de ella, era una señora mayor, muy cariñosa, sobre todo con los niños pobres, les daba mucho cariño, y cuidaba a los enfermos –explica-. Era como una salvadora, nos quería muchísimo a todos los niños que estábamos allí y era muy religiosa, creía muchísimo en Dios, lo seguía fielmente. Nos quería mucho, nos salvaba”, añade.
Ese colegio era su familia. A los cuatro años comenzó a comunicarse a través de la lengua de signos, entró en contacto con los oyentes del colegio y empezó a tener relación con otras personas con discapacidad. Fue como volver a nacer. A esa edad le conoció su madre adoptiva, Carmen Corcuera. Le enseñó a andar, a peinarse, a jugar, a vestir sus muñecas, a coser, a relacionarse, a vivir. Disfrutaba con ella. Bastaba con que le tocaran el hombro para comunicarse. Ya no estaba sola en el mundo.
Con siete años llegó a Madrid y a los ocho entró en el entonces colegio Vicente Mosquete. Allí empezó a leer, a escribir el braille y a comunicarse con la lengua de signos española y con el sistema dactilológico en palma. Estudió Logopedia, para practicar la lengua oral y comenzó a utilizar la tablilla de braille para comunicarse. d. “Estudié Educación Especial porque quería aprovechar los conocimientos de mi discapacidad para estudiarla más a fondo, además de conocer otros tipos de discapacidades. Me resultaba curiosa, quería conocer otras situaciones y conocer otras capacidades diferentes. Gracias a lo que he estudiado me he dado cuenta de todos los tipos de discapacidades que hay. Además yo quería trabajar como profesora en el futuro y aproveché esta situación”.
“Es verdad que fui la primera persona sordociega en licenciarse en la Universidad de España pero cada persona sordociega es diferente, hay muy pocas sordociegas que llegan acceder a la Universidad”, comenta. De joven leyó la historia de Hellen Keller y quiso aprender de ella porque le resultaba muy inteligente, de su papel, de cómo actuaba. “Pero yo no he llegado a ser tan inteligente, somos diferentes”, matiza sonriendo. Le encanta leer sobre Biología, el nacimiento de la vida o sobre la muerte.
Gennet se considera una persona fuerte. Lo demuestra a diario en su forma de afrontar cada jornada, en las cosas más cotidianas, comprar la comida, hace las tareas del hogar, en su capacidad para resolver cuestiones que a algunos pueden resultar tan sencillas como orientarse en la calle pero que tan difíciles para las personas sordociegas. Ayudada y agradecida siempre con la mediación y el apoyo que le brinda la Fundación ONCE para Personas Ciegas (FOAPS) y encantada con el refuerzo que le aportan las nuevas tecnologías.
¨Tengo un carácter muy positivo que me ayuda a hacer muchas cosas –comenta-. Hay veces que tengo que pasar por situaciones difíciles, como por ejemplo horarios que son incompatibles en los que esté ocupada y tenga que darle prioridad a cosas que no me apetecen en ese momento, pero me considero una persona muy positiva y cuido bastante de mi vida y de mí misma”.
Y esa fortaleza humana le lleva ahora a animar a la sociedad a que se abra a las personas sordociegas. “Quiero que sepan que podemos llevar una vida independiente, que podemos desarrollarnos como personas, trabajar y hacerlo todo. Quiero darle importancia a ese hecho porque hace falta una mentalidad más abierta en la sociedad –concluye-. Tienen que saber que somos capaces de hacer lo que deseamos y no se tienen que marginar porque pueden hacer las cosas y hay que respetarlos y aceptarlos como son”.
No dejes que tu mochila se sobrecargue hasta llegar al punto de que no puedas casi moverte y la vida en general te pese. No pierdas las ganas de seguir adelante ni dejes tu presente a manos del pasado. Tampoco te obsesiones con olvidar, porque el olvido no es amigo de la intención.
Por incómodo y complicado que resulte tienes que sacar lo que llevas dentro, para aprender a crecer con ello en lugar de anclarte. El primer paso consiste en reconocer qué provoca nuestro peso y aceptarlo.
Puede que incluso, te inunde un sentimiento de identidad y de apego que te impida, en un principio, deshacerte del peso que conforma tu mochila emocional. Ese vértigo es el miedo enmascarado fruto de la rutina, te has acostumbrado tanto a esas heridas que si faltan parece que no eres nadie y se origina un vacío. Pero créeme, solo es el temor a la incertidumbre y a lo desconocido: el temor a soltar.
Aprende a vaciarla soltando todo aquello que te tiene preso del pasado y te agota. Acepta tus errores, identifica y conoce tus emociones, dale alas a tus sueños, descubre tus fortalezas, valórate y sobre todo, aprende que crecer es aceptar lo que te pasa y no luchar contra ello, sino encontrarle una enseñanza. Recuerda que a veces soltar no es un un simple adiós sino un agradecimiento por lo aprendido para seguir avanzando.
Dejar ir el peso que nos paraliza de nuestra mochila emocional es un gran paso para permitir que entren otros sentimiento y experiencias nuevas, algunos nos ayudarán a seguir creciendo y otras tendremos que sanar de nuevo, pero así es la vida. Despréndete del peso que te paraliza por tu bien y por el de tu espalda.
Lema: La libertad está en ser audaz (Robert Frost)
LUZ EN EL CAMINO CON CONSTANZA ORBAIZ
Constanza Orbaiz nació en Buenos Aires, su infancia transcurrió jugando en la vereda y conociendo profesionales en su discapacidad. Con esfuerzo logró concluir la escuela para luego estudiar Psicopedagogía. Hoy trabaja en un colegio en el nivel inicial y en su consultorio particular tiene muchos pacientes con diagnósticos similares al suyo. Fundó el proyecto “Desde Adentro”, a través del cual brinda diversos talleres y capacitaciones, dando a conocer una mirada diferente sobre la discapacidad. En 2013 recibió el premio bienal Alpi y el premio TOYP “Joven sobresaliente de Argentina”.
Cuando nació, la falta de oxígeno le ocasionó una lesión en el cerebro que afectó toda la parte motriz. Fue diagnosticada con parálisis cerebral. "Nadie sabía que iba a poder hacer; pero lo seguro era que de poder iba a poder distinto".
En la primaria encontró muchos maestros que la acompañaron, que pudieron ver en ella "todo lo que podía hacer". Pero no faltó el otro lado. El de aquellos que pensaron que no iba poder terminar la primaria. "Preferían que esté en el fondo del aula porque no sabían qué hacer conmigo. No estaban preparados. Nadie está preparado. La discapacidad no te manda un whatsapp y te dice: 'Prepárate, llego en cinco'".
Para Constanza la única forma de estar preparados es "valorando la diversidad como parte de lo cotidiano", en otras palabras, "valorando a cada persona por lo que puede dar". "En la escuela donde trabajo está Miguel. Miguel tiene cinco años y le cuesta mucho quedarse sentado. Su maestra me consulta preocupada, yo lo observo y le sugiero que en vez de que esté sentado en el piso esté en una silla, para que sus pies y espalda estén apoyados y él se sienta más contenido y pueda prestar más atención… Como me pasa a mí. Y funcionó. Porque siempre funciona la mirada puesta en lo que se puede, porque en lo que no se puede, no se puede construir nada… se cae".
Los médicos "ponen definiciones" de las enfermedades pero se olvidan de las personas. "En cuanto a la parálisis cerebral te indican fortalecer el tronco, estimular la marcha, poner férulas, hacer cirugías… Pero ¿y la persona? ¿La miraron? ¿Saben cómo convive con sus dificultades? ¿Cuáles son sus deseos y sus temores? ¿Si son chicos respetan sus espacios de juego tan necesarios para crecer? La persona siempre es mucho más que un diagnóstico".
“Curarme fue aprender a convivir con lo que me pasa". No somos pobrecitos, ni tampoco somos angelitos, no somos especiales. Especiales son las pizzas. No tenemos capacidades diferentes, capacidades diferentes tienen un balde y un vaso. Somos personas con discapacidad. Personas".
Una de las cosas que más impresionan al hacer el Camino de Santiago son los símbolos que están involucrados con esta experiencia: La flecha amarilla, la vieira o concha, el bastón y hasta la mochila y la compostela.
Los símbolos son aquellas cosas que asociamos con un significado especial para nuestras vidas, frecuentemente, despiertan en nosotros una emoción y en otras personas puede no tener ninguna conexión. Podemos vincular símbolos y ayudar a nuestro subconsciente para fortalecernos en la búsqueda de nuestro crecimiento personal.
La “flecha amarilla” del Camino es sin duda una gran enseñanza..esa flecha pintada en un árbol, en un poste, en el piso, indica el camino a seguir para no equivocarse; eso nos hace sentirnos seguros y confiados sobre todo cuando vamos a la aventura y no conocemos bien el camino. ¿Quién o qué es esa flecha amarilla en nuestra vida?: Una amigo, tu voz interior a través de la intuición o quizás un coach o mentor que sin hacer el camino por ti, puede irte dando claves y aportándote, desde su experiencia, otros puntos de vista para que el camino hacia tus metas sea más agradable y efectivo.
Los símbolos son importantes para nuestra vida. Si no estamos atentos a ellos corremos el riesgo de perder “el norte”, la meta a la que nos dirigimos
Lema: Lo mío fue un “flechazo”
LUZ EN EL CAMINO CON DOWN EN EL COLEGIO NTRA SRA DEL ROSARIO
En el corazón del Camino de Santiago (Arzúa), se encuentra el CPR Plurilingüe Nuestra Señora del Rosario (perteneciente al Instituto Secular Hijas de la Natividad de María y La Grande Obra de Atocha); al que la Fundación Down Compostela acordó concederle el PREMIO DOWN COMPOSTELA 2018 por su trabajo e implicación del equipo de maestros y su evolución hacia un trabajo inclusivo dentro del aula. Desde que hace siete años entró un alumno con Síndrome de Down, provocó una clara evolución en las estrategias didácticas y en la metodología de trabajo empleada en el colegio Nuestra Señora del Rosario de Arzúa, el colegio Atocha; haciendo un gran esfuerzo para adaptarse al cambio, a las necesidades del grupo y las demandas especificadas de cada uno de los alumnos, con y sin discapacidad, el colegio es un ejemplo de buenas prácticas y en la aplicación de la metodología del aprendizaje cooperativo. Demostrando así que la inclusión real dentro del aula de un alumno con Síndrome de Down es posible. Porque en este centro lo prioritario es generar el bienestar de los escolares, la normalidad y hacer que en la escuela haya un clima agradable donde compartir, descubrir y aprender sea posible para todo el alumnado; siguiendo una máxima de su fundador el Venerable Baltasar Pardal (sacerdote) que dice: “El niño es el verdadero libro donde un maestro ha de leer para darle lo que necesita y poder generar la Vida Plena a la que ha sido llamado”. Los galardones fueron entregados el 21 de marzo en una gala conjunta que la Fundación Down Compostela y la Federación Down Galicia organizada en el Hostal de los Reyes Católicos para conmemorar el Día Mundial del Síndrome de Down.
Voy avanzando por el camino y haciendo la experiencia tan bonita de saberme acompañado. A veces mis limitaciones, los bajones emocionales me hacen añorar la presencia de una mano amiga que me sostenga y consuele.
Una antigua canción decía “en la vida no se puede caminar por separado hay que apoyase en el otro para sentirse apoyado.” La familia, mis amigos son mis compañeros de viaje, a algunos los tendré a mi lado físicamente, a otros los llevo en el corazón y son también, de otra manera, compañeros de viaje.
Nunca vamos solos por el camino de la vida, hay una presencia silenciosa, pero real que camina con nosotros siempre y que como a los discípulos de Emaús si estamos atentos nos ilumina y se manifiesta en “el compartir el pan”.
"Nuestro Padre, como un padre con su hijo, nos enseña a caminar. Nos enseña a ir por el camino de la vida y de la salvación. Son las manos de Dios que acarician en los momentos de dolor, que nos consuelan. ¡Nuestro Padre nos acaricia! Nos quiere mucho”. (Papa Francisco)
Es bonito caminar en familia porque fortalece las relaciones familiares y equilibra las emociones
El secreto radica en que estos momentos permiten conversar tranquilamente, sin que existan otros estímulos que rompan ese vínculo emocional. Equilibra las emociones
Se ha demostrado que caminar en familia regula las emociones y previene la ansiedad y la depresión tanto en los padres como en los más pequeños de casa. Lo que sucede es que al caminar se liberan endorfinas, unos neurotransmisores que generan una sensación de bienestar que contrarresta los efectos negativos de las preocupaciones y los conflictos cotidianos.
Lema: Caminos hacen amigos
LUZ EN EL CAMINO CON LOS HERMANOS DE SAN JUAN DE DIOS
En 1941 los Hermanos Hospitalarios de San Juan de Dios deciden poner en marcha una fundación en Valladolid para niños deficientes mentales. El Centro San Juan de Dios, entidad sin ánimo de lucro, perteneciente a la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios, inicia su actividad en el sector de atención a personas con discapacidad intelectual en el año 1960 siendo el primero en España en este tipo de atención especializada. Durante este tiempo el Centro ha ido adaptando sus modelos de intervención y actividad a la necesidad social del momento. Para cumplir su misión el Centro cuenta con instalaciones adecuadas al tipo de atención que presta, desarrollando y adaptando los programas a las nuevas necesidades de los usuarios, en sintonía con los principios ideológicos de la institución así como las buenas prácticas que derivan del sector.
En la actualidad hay + de 500 plazas gestionadas en 1 colegio de educación especial; en 1 centro de día; la gestión de 3 centros asistenciales y ocupacionales; 1 Centro Especial de Empleo viviendas; 3 residencias; 9 viviendas; 4 servicios de promoción de la a u t o n o m í a p e r s o n a l y respiro familiar.
En línea con la misión del Centro, pretende prestar el apoyo necesario con las familias de las personas con discapacidad intelectual y para, que desempeñen el rol adecuado en cada momento, y contribuir de esta manera a la mejora de la calidad de vida de los miembros de la unidad familiar.
Voy caminando y tengo la certeza que la espiritualidad es uno de los valores intrínsecos a todos los peregrinos que realizamos el Camino de Santiago. “El Camino te cambia”, “Del Camino no vuelves igual” o “El Camino te ayuda a encontrarte contigo mismo” son algunas de las reacciones más comunes entre aquellos que llegamos a la meta. Porque todos sabemos que en el Camino de Santiago hay un camino físico, el que recorres kilómetro a kilómetro; y otro camino espiritual o interior, que es personal y único.
Porque el peregrino emprende la ruta a la tumba del Apóstol persiguiendo un reencuentro con la fe, pero también con espíritu de búsqueda o de viaje interior. En una sociedad que te arrastra y te absorbe, el Camino de Santiago te permite parar y tomar conciencia de ti mismo. La reflexión, la amistad, la solidaridad, la reflexión, la comunión con la naturaleza o la soledad son algunas de las sensaciones que permiten a todo peregrino esa conexión espiritual.
Este sentimiento es tan fuerte que en los últimos años han surgido diferentes iniciativas en las que el Camino de Santiago se convierte en el escenario perfecto para trabajar el desarrollo personal
Lo cierto es que el Camino de Santiago tiene algo que te cambia por dentro. Mucha gente que lo realiza a priori por motivos deportivos, culturales o turísticos, acaba teniendo una experiencia que va más allá de un simple viaje o una ruta de senderismo. Se reconoce ese poder transformador del Camino. “Te vuelve a conectar contigo mismo. Cuando haces el Camino te das permiso para escucharte a ti mismo y descubrir que todas las respuestas están dentro de ti”, explica.
Porque más allá del viaje físico e incluso de la motivación con la que aprendes esta aventura, el Camino de Santiago es un lugar para la reconexión, para hacer una parada en tu día a día, para tomar conciencia y escucharse y, por supuesto, para tomar decisiones e introducir los cambios que necesitas en tu vida.
Lema: El Camino no se anda, se vive.
LUZ EN EL CAMINO CON LOS JUEGOS PARALÍMPICOS
Aunque el deporte para personas con discapacidad ha existido desde la Antigüedad, su verdadero desarrollo se produjo después de la Segunda Guerra Mundial, con el propósito de rehabilitar a los numerosos soldados y civiles que habían resultado heridos durante la contienda.
En 1943, el Gobierno británico encargó al doctor sir Ludwig Guttmann -un médico judío nacido en Alemania en 1899y exiliado a Gran Bretaña al inicio de la guerra- crear la Unidad Espinal en el hospital de Stoke Mandeville, en la localidad de Aylesbury, al noroeste de Londres. Allí comenzó a introducir el deporte como herramienta de recuperación física y psicológica y, pasado un tiempo, la rehabilitación dio paso a la recreación y a la competición.
Casi al mismo tiempo, en Estados Unidos, el baloncesto en silla de ruedas empezaba también a desarrollarse. En 1949 se realizó el I Torneo Nacional de Baloncesto y se formó la Asociación Nacional de Baloncesto en Silla de Ruedas.
El 29 de julio de 1948, coincidiendo con la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de Londres, el doctor Guttmann organizó la primera competición con otros hospitales de ámbito nacional para deportistas en silla de ruedas, a la que bautizó como Juegos de Stoke Mandeville. Este campeonato, que supuso un hito en la historia del movimiento paralímpico, sólo incluyó la modalidad de tiro con arco, con participación de 16 soldados y mujeres con lesión medular. Cuatro años más tarde se unieron los veteranos holandeses y surgieron los Juegos Internacionales de Stoke Mandeville.
Aquellos Juegos Internaiconales de Stoke Mandeville fueron la competición pionera que dio origen posteriormente a los Juegos Paralímpicos, conocidos por aquel entonces como “Olimpiadas para minusválidos” (el término Juegos Paralímpicos no se acuñó hasta los años 80).
La primera edición tuvo lugar en Roma en el año 1960 y comenzó seis días después de la clausura de los Juegos Olímpicos. Allí se dieron cita durante otros seis días 400 deportistas con lesión medular llegados de 23 países
Barcelona 92 marcó un antes y un después, puesto que allí se fraguaron los Juegos Paralímpicos tal y como los conocemos hoy: un festival deportivo único con dos citas, la olímpica y la paralímpica, que comparten las mismas instalaciones deportivas, la misma Villa de los atletas el mismo comité organizador, accesibilidad garantizada en las instalaciones y el transporte tanto para los deportistas como para los espectadores, los mismos estándares de calidad en la organización de la competición, el mismo cuerpo de voluntarios…
Desde el punto de vista de los Juegos Paralímpicos en sí mismos, Barcelona 92 introdujo innovaciones decisivas como la introducción de marcas mínimas para establecer límites de participación, la realización por primera vez de controles de dopaje a los deportistas, y muy especialmente, la introducción de un nuevo método de clasificación de la discapacidad para la competición que permitió agrupar a los deportistas según su capacidad física y deportiva en los deportes de atletismo, baloncesto, esgrima, natación, tenis de mesa, tiro con arco y tiro olímpico. Otra de las grandes innovaciones fue la de contar por primera vez con una señal propia de televisión.
Aunque Seúl 88, y especialmente Barcelona 92, marcaron un camino de no retorno, fue en el año 2001 cuando el Comité Olímpico Internacional y el Comité Paralímpico Internacional firmaron un acuerdo para proteger los Juegos Paralímpicos y asegurar la práctica de “una única candidatura, una única ciudad”. Así se ratificó que desde 2008 los Juegos Paralímpicos tendrían lugar poco después que los Olímpicos en las mismas sedes e instalaciones y se obligó a todas las ciudades candidatas a albergar ambos acontecimientos deportivos.
Santiago es uno de los amigos íntimos de Jesús. Estuvo con el en los momentos cruciales de su vida. Mirar a Santiago es ver a Jesús.
A veces caminamos sin rumbo...como por inercia y no sabemos el camino. Del mismo modo que una flecha amarilla marca el camino al que peregrina a santiago, el mismo Apóstol al conocerle nos indica el camino verdadero que conduce a la VIDA.
Santiago estuvo cerca “de la Vida” miro a los ojos a Dios cara a cara, caminó con él y dio la vida por el.
Peregrinamos a la tumba de un vivo, porque no es posible que” un muerto” mueva tantos corazones, tanta gente que quiere caminar para buscar el sentido de su vida.
Santiago nos indica el camino, Santiago es compañero de camino que me indica donde está LA SALUD verdadera.
Lema: Un amigo es un tesoro.
LUZ EN EL CAMINO CON SPECIAL OLYMPICS – ASPAS
Sofía Prol Rodríguez, voluntaria desde el año 2016 de nuestra entidad, acaba de recibir el “Premio Galicia de Acción Voluntaria”, que otorga la Xunta de Galicia a través de su Servicio de Voluntariado y Participación.
Para otorgar el galardón, la Xunta de Galicia valoró el compromiso y la trayectoria solidaria de Sofía en diferentes actividades deportivas, culturales y de ocio que organiza Special Olympics Galicia y en la Asociación compostelana de ASPAS, con el fin de mejorar la calidad de vida y la inclusión social de las personas con discapacidad intelectual o del desarrollo.
Alumna del Colegio La Salle de Santiago, este galardón supone también un reconocimiento del importante vínculo del Colegio con nuestra organización y un orgullo para todo nuestro movimiento, que siempre hace gala de contar con una sólida base de voluntarios que posibilitan que cada actividad sea un éxito.
Special Olympics Galicia es hoy una realidad gracias al tiempo, la energía, el compromiso y el entusiasmo que muestran nuestros voluntarios. Tenemos una enorme deuda con los cientos de personas que encuentran el tiempo para hacer del mundo un lugar mejor, y que eligen Special Olympics Galicia para hacerlo.
La vida es un camino difícil donde hay momentos para todo buenos y menos buenos. Que te descubran una enfermedad no es fácil de aceptar, pero poco a poco con la ayuda del gran Dios es posible acogerla, es posible vivir con ella
A veces el dolor nos sorprende y se hace nuestro compañero de camino.
Dolor físico y dolor del alma, ambos hacen mella en nuestro animo.
Para los dos necesitamos analgésico...y el mejor de todos sin duda es Dios
Dios es el mejor paracetamol para nuestras enfermedades. El nos sana por dentro y nos da la fortaleza y energía suficiente para afrontar nuestros dolores físicos.
“El es el que perdona todos tus fallos, el que sana todas tus enfermedades; (Salmo 103:3)
Dios puede sanarnos si confiamos en El totalmente. Quizá permita que el dolor persista pero nuestra disposición y actitud será diferente con El. El nos da un horizonte de esperanza, es esa pastilla de fortaleza espiritual que una vez ingerida nos convierte en aguerridos luchadores.
En el camino de Santiago y en todos los caminos de nuestra vida el paracetaDios es esencial para conseguir la meta.
Lema: Sin dolor no hay gloria.
LUZ EN EL CAMINO CON CARLOS Y CRISTINA
Cristina y Carlos son un matrimonio madrileño católico que ha formado una familia numerosa.
Pedro, su octavo hijo, nació con malformación en los pulmones, el corazón y el cerebro, y no tenía ojos. «Su esperanza de vida era muy corta y cada día de vida era un regalo y así lo vivimos», explica Cristina.
Las idas y venidas contínuas a la UCI y las estancias en planta de hospital hicieron que el matrimonio conociera otra realidad: niños enfermos que carecían de padre y madre. Comenzaron a estar con ellos y descubrieron que algunos iban a Casa Belén, un Hogar para niños con discapacidad atendido por las Hijas de la Caridad.
Pedro fue un niño muy amado y murió a los cinco años. Pero aquella experiencia en el hospital siguió haciendo mella: «Vimos que nos había nacido -dice Cristina- la vocación de cuidar niños con enfermedades que les obligaran a estar hospitalizados y estuvieran solos, que no tuvieran el amor de sus padres».
Así comenzadoron a acoger a niños enfermos, no queridos por sus padres: Javier, prematuro, con derrame cerebral, intervenciones cardíacas, iliostomía....; Claudia, niña con hidrolcefalia; ...
Mientras camino experimento que tener un amigo es tener un tesoro...una vida sin amigos está vacía y triste.
En el camino de la vida necesitamos apoyarnos en alguien que nos acompañe con el cariño, que nos escuche, que nos aliente en las dificultades, que esté pendiente de nosotros y nos ayude a superar los baches.
"No nos dejemos aprisionar por la tentación de quedarnos solos y decaídos, quejándonos por lo que sucede. No cedamos a la lógica inútil del miedo al repetir con resignación que todo va mal y nada es como antes. Esta es la atmósfera del sepulcro. El Señor deseaba, en cambio, abrir el camino de la vida, el del encuentro con Él, de la confianza en Él, de la resurrección del corazón”. Papa Francisco
Los amigos son como ese antinflamatorio necesario para caminar que nos hace mas ligero y cómodo el peso de cada día. Dice la Escritura que “quien ha encontrado un amigo ha encontrado un tesoro” (Eclesiástico, 6,14)
Ante las ampollas de la vida, la mejor tirita es la
amistad, el tener alguien en quien llorar cuando el dolor se hace fuerte,
cuando vemos desdibujado el horizonte de nuestra salud, de nuestra vida.,
cuando
nos sentimos solos ante las dificultades y las decisiones importantes, un amigo
es una fuerza arrolladora que nos hace capaces de soportar cualquier
contratiempo.
En mi enfermedad experimento que la ayuda de otros es imprescindible y
sanadora.
Lema: No hay camino sin soledad.
LUZ EN EL CAMINO CON EL INSTITUTO SECULAR HOGAR DE NAZARET
“La Providencia” es un proyecto humano y cristiano con proyección social, que tiene sus orígenes en el año 1941 y fue fundada por D. Luís Zambrano, sacerdote diocesano natural de Fuente del Maestre. Este Centro, que depende el Instituto Secular Hogar de Nazaret, defiende los derechos que tienen como PERSONA este grupo de mujeres adultas, con discapacidad intelectual que forma la familia de La Providencia. Su estilo de vida es un estilo familiar donde se vive, organizada en pequeños grupos.
Su nacimiento se remonta a 1941, años difíciles cuando en Ribera del Fresno, como en todos los pueblos, había mucha gente pobre, no solo material, sino también en lo intelectual. La Institución Hogar de Nazaret, que ya existía por esa fecha en esta localidad, vio la necesidad de atender a estas personas indefensas y la asumió.
Primero comenzó en una casa grande prestada, con unos dormitorios corridos. Era todo muy casero y muy familiar y todo a nivel asistencial. Se mantenían de los que traían la gente del pueblo: aceite, pan y sobre todo confiando en la Providencia divina, de ahí que este Centro mantenga este nombre. En 1982 se terminó de construir el actual edificio que está situado en la calle La Providencia, 3 en Ribera del Fresno.
Voy cubriendo mi credencial con el sello de parroquias, monasterios, catedrales, albergues por los que voy pasando, muchos de estos edificios han sido construidos con una gran belleza que nos remite a Dios. También es fundamental el contacto con la Creación. Realmente me encontré con paisajes hermosos, llenos de colores y de vida, que no hacían más que remitirme una y otra vez al Creador y a elevar una acción de gracias por estar allí y por su obra. Dios nos interpela una y otra vez con las maravillas de la naturaleza en el día a día, y esto es ocasión para darle gloria y para agradecerle por todo lo que tenemos que es realmente un tesoro.
«El cansancio del andar, la variedad de paisajes, el encuentro con personas de otra nacionalidad, los abren a lo más profundo y común que nos une a los humanos: seres en búsqueda, seres necesitados de verdad y de belleza, de una experiencia de gracia, de caridad y de paz, de perdón y de redención. Y en lo más recóndito de todos esos hombres resuena la presencia de Dios y la acción del Espíritu Santo. Sí, a todo hombre que hace silencio en su interior y pone distancia a las apetencias, deseos y quehaceres inmediatos, al hombre que ora, Dios le alumbra para que le encuentre y para que reconozca a Cristo. Quien peregrina a Santiago, en el fondo, lo hace para encontrarse sobre todo con Dios» (Papa Benedicto XVI en Misa por el Año Santo Compostelano en Plaza del Obradoiro, Santiago de Compostela, 6 de noviembre de 2010).
Lema: El amor es el corazón de la acción
LUZ EN EL CAMINO CON CÁRITAS EN EL SERVICIO A LA DISCAPACIDAD
Desde Cáritas Diocesana de Lugo, damos respuesta a las necesidades de las personas con diferentes situaciones de discapacidad, intentando promover en todo lo posible su autonomía personal y mejorar su calidad de vida en todos los aspectos, en igualdad de oportunidades
Va dirigido a personas que tengan una discapacidad reconocida igual o superior al 33% que carecen de recursos sociales y económicos suficientes para su autonomía personal y que no reciban atención suficiente por los servicios sociales públicos o de otras entidades.
Este programa nació en 1978 vinculado a las acciones del Programa de mayores “Vivir na Casa”, y prestaba un servicio de apoyo y acompañamiento a las personas con discapacidad para contribuir a hacer efectivo el derecho y el deseo de permanecer en su casa en condiciones dignas.
Desde del año 2012 hasta la actualidad el proyecto contempla recursos para apoyo a necesidades básicas, recursos para combatir el aislamiento y la soledad de las personas con discapacidad y sesiones de formación.
Las actividades que se llevan a cabo son: acogida, información, asesoramiento y orientación, ayuda a necesidades básicas, actividades recreativas y socioculturales, acciones formativas no laborales.
Nuestros proyectos necesitan tu apoyo,
A pesar de ir en grupo me gusta ir haciendo silencio en mi interior
En uno mismo: el interior del corazón En la sociedad actual vivimos en medio de ruidos que nos aturden y distraen, en un activismo febril que nos impide paramos a pensar entrando dentro de nosotros mismos. Por eso es muy importante saber “pararse”, “hacer silencio” y 20 21 dedicar algún tiempo a encontrarse sinceramente a solas con lo que cada uno llevamos en nuestro corazón. Es en el corazón donde está lo verdaderamente importante de la vida. Es en el corazón donde podemos encontrar lo que hay de más auténtico en nuestra vida: los deseos y preocupaciones, los fracasos y esperanzas... Y es ahí donde podemos encontrar a Dios. “Señor, Tú me sondeas y me conoces. Me conoces cuando me siento y cuando me levanto. Me estrechas detrás y delante, me cubres con tu palma. Tú has creado mis entrañas, me has tejido en el seno materno” (Sal 138)
Lema: Para escuchar, hay que saber callar.
LUZ EN EL CAMINO CON AIXINA
AUXILIA –Orense surge por iniciativa del Padre Domingo Gómez Freire, que, oyendo hablar un día de los grupos de voluntariado de Auxilia que había por la geografía española, decidió unirse a la iniciativa con un grupo de alumnas suyas del Colegio MM. Franciscanas, seminaristas y el grupo local de boy-scouts. Se fundó así un núcleo ourensano de la Entidad nacional, dedicado como ella a visitar y dar clases a niños y adultos discapacitados o enfermos de larga duración, en los hospitales o en sus domicilios, tanto de la capital como del rural ourensano.
El canónigo Domingo Gómez Freire, el fundador de Auxilia-Ourense y el presidente de honor de Aixiña, falleció por causas naturales en la madrugada del lunes en la Residencia Sanitaria de Ourense cuando contaba con 83 años(2014)
En 1989 comienza a gestarse en el seno de Auxilia un proyecto totalmente vanguardista e innovador: la construcción de un Centro Integral de Servicios (CIS) que acogiese un buen número de recursos, anteriormente inexistentes en Ourense, y específicos para las personas con discapacidad
la directiva de Auxilia nacional no se sintió preparada para asumir un proyecto que, aunque provenía de uno de sus núcleos, no se ajustaba a las líneas de trabajo de la Entidad. Por eso comunicó su apoyo total a la iniciativa, sin asumir ningún otro compromiso. Así se hizo necesaria la desvinculación de Auxilia, lo que supuso el nacimiento, en agosto de 1991, de AIXIÑA, entidad a la que Auxilia – Orense cede todo su capital.
En 1993, AIXIÑA crea su Centro Especial de Empleo, con dos objetivos principales: integrar laboralmente a las personas con discapacidad y contar con una fuente de autofinanciación para la Asociación, que permitiese dar continuidad a los proyectos sociales al margen de las subvenciones públicas. El CEE ha llegado a contar con 115 trabajadores y trabajadoras, y se ha mantenido siempre el porcentaje de, al menos, el 70% de personal con discapacidad.
Durante mi peregrinación tuve la oportunidad de rezar también por muchas personas, de ofrecer mis esfuerzos y oraciones al Señor, así como la misa diaria de los peregrinos en cada pueblo donde paraba cada día, por numerosas intenciones que amigos, familiares y hasta personas desconocidas me pidieron llevara en mi mente y en mi corazón durante todo mi Camino. Fue muy bonita esta experiencia porque de alguna forma, me sentí muy acompañado de todos ellos, y a su vez los acompañé cuando le pedía al Señor por sus esperanzas, por sus sueños, sus propósitos y por las situaciones que les inquietaban.
Lema: No se puede caminar sin pan. O bien El pan nuestro de cada día
LUZ EN EL CAMINO CON FE Y LUZ
Fe y Luz son Comunidades de encuentro formadas por personas con discapacidades mentales, sus familias y amigos, en especial jóvenes, que se reúnen con regularidad y desde una perspectiva cristiana, para compartir su amistad, rezar juntos, festejar y celebrar la vida.
Conocí a Denis cuando él tenía seis años. Actualmente vive en un centro para personas con discapacidad. Denis tiene trisomía. Al contrario de la mayoría de personas con trisomía, Denis es muy frío y nunca abraza a nadie.
Nos fuimos a un campamento, de vacaciones. En la misa, nos reunimos unas veinte personas alrededor del altar. Después de haber comulgado, cada uno se ponía a rezar y a cantar. Cuando quise ir a sentarme en el asiento reservado para el sacerdote, Denis se sentó en mi sitio. ¿Qué iba a hacer yo? ¿Impedírselo? ¿Permitírselo? ¿Sentarlo en mis rodillas? ¿Sentarme en el suelo a su lado? Me senté en el suelo.
Poco después, Denis se bajó de su asiento, se acercó a mi y me abrazó. ¡Algo totalmente inusitado! A continuación, Denis abrazó a todos y cada uno de los presentes. Este extraordinario acontecimiento nos marcó mucho a todos.
Por la tarde, los miembros del equipo comentamos lo que había ocurrido durante la Eucaristía. Todo el mundo estaba revolucionado, porque Denis nunca había hecho algo así. Era evidente que solo Jesús había podido obrar aquella transformación. Para nosotros estaba claro que Jesús había descendido en persona para unirse al pobre y transfigurarlo… Padre Janusz, Polonia
La belleza de Fe y Luz, es demostrar que en situaciones en las que no podemos hacer mucho, siempre hay algo para vivir. Mons. Perrier, obispo de Tarbes-Lourdes
En una sociedad científica y técnica se trata de vaciar de sentido religioso las realidades humanas y negar todo sentido de trascendencia en la vida. Se afirma que Dios es algo lejano a quien no le preocupa la vida de los hombres ni el devenir de la historia. Sin embargo, el Dios cristiano es Alguien que dio la vida a todos los seres humanos y creó todo el universo. Pero no se desentendió de ellos sino que continúa acompañándoles haciéndose presente en los acontecimientos de cada persona y en las encrucijadas de la historia. En los momentos de gozo y en las situaciones de tristeza y dolor, Él siempre camina a nuestro lado. En ellos podemos encontrar siempre la presencia de ese Dios con su ayuda, consuelo, fuerza y esperanza. Para ello es necesario saber mirar la vida con los ojos de la fe para poder descubrir en cada acontecimiento la presencia de Dios.
“Acaso una madre puede olvidarse de su criatura... pues, aunque ella se olvide, Yo no me olvidaré de ti”. (Is 49, 15). “Venid a Mí todos los que estáis cansados y agobiados, y Yo os daré descanso” (Mt 11, 28).
Lema: Quédate con nosotros que la tarde está cayendo.
LUZ EN EL CAMINO CON EL COTTOLENGO DEL PADRE ALEGRE
El Cottolengo del Padre Alegre es una forma de vivir y de ver en cristiano la vida. Su misión es la de ser testigos del amor de Dios presente en el mundo.
El Cottolengo es una familia formada por personas que padecen enfermedades y deficiencias incurables y que sean pobres, que por sus posibilidades económicas no puedan ser atendidos en otros centros. Somos personas felices, enseñamos a valorar lo que tenemos y que por encima del tener o el poder está el ser.
Vivimos de la Divina Providencia, con la máxima “Amar a Dios y a los pobrecitos por amor de Dios, pero amor de obras no de palabras”
En el camino tengo tiempo para pensar, para mirar hacia dentro, para conocerme y encontrar a ese Dios que bulle dentro de mi y que pro estar pegado a mi piel, está deseoso de salir a mi encuentro. Así hizo el Padre Bueno en la parábola del hijo pródigo. Dios es siempre el protagonista.
Durante el camino descubro quien soy y mis enfermedades, las físicas y las del alma y todos las tenemos. Descubro mis egoísmos, mis pensamientos negativos, mi mirada ni siempre limpia, mis prejuicios etc… y me abro al cambio de rumbo. Busco el mojón de Dios que me va indicando el sendero. Me detengo, me acepto y me pongo las pilas para recomenzar lleno de energía…
La enfermedad es una circunstancia de mi vida, pero no engloba mi vida entera. Yo no soy mi enfermedad, “tengo solo una enfermedad” que puede mermar mis habilidades y capacidades pero no mis ganas de vivir, de superarme
Lema: No importa caer, importa levantarse
LUZ EN EL CAMINO CON FRATER
La Fraternidad cristiana de personas con discapacidad es una
realidad que surge del corazón mismo de la enfermedad y la limitación física y
del deseo de superarlas.
A través de la relación de persona a persona, de
igual a igual, las personas enfermas y con discapacidad vamos asumiendo el
protagonismo de nuestra propia vida y vamos invitando a otras a sumarse en esta
tarea. Así asumimos esta responsabilidad junto con quienes quieran vivir y
sentir nuestras mismas aspiraciones.
Con la llegada del otoño (2020) comenzamos un nuevo curso. Lo hacemos marcados desde marzo por el drama mundial de la pandemia. Somos conscientes de nuestra vulnerabilidad dentro de un mundo sufriente. Percibimos muchos síntomas de malestar en el estado anímico de las personas. El miedo a veces se convierte en violencia y rechazo a los más débiles de la sociedad. Como Frater conocemos bien el mundo del dolor y el aislamiento social del estigma de la discapacidad. En este sentido hemos de aportar nuestra experiencia y alzar la voz de la denuncia profética cuando llegue el momento.
La noche en el mar del dolor de los primeros discípulos nos lleva al dolor provocado por el COVID-19, a vivir la soledad, el aislamiento. La presencia del Señor en la barca en los momentos de dificultad nos ayuda a mantener viva la esperanza. La misión de Frater es volver a echar las redes, confiar en Su PRESENCIA en nuestra vida de fraternos y realizar la tarea a la que estamos llamados a ser: “pescadores de hombres” en los lugares donde estamos
Por supuesto tuve mis ratos de oración personal mientras caminaba, y de reflexión mientras veía el paisaje, pero también tenía (sin planificarlo) mis ratos de conversación con otros peregrinos, de conocerlos y darme a conocer, de compartir la vida. Fue muy gratificante encontrar personas de lo más variadas, de países que nunca hubiese pensado conocer, y compartir desde lo más cotidiano. Y entender en ello que realmente existen personas con un gran corazón en el mundo, que buscan a Dios (a veces sin darse cuenta), y que anhelan cosas buenas y verdaderas para su vida, aún a pesar de las diferencias culturales que puedan existir.
Lema: compartir es siempre una riqueza
LUZ EN EL CAMINO CON CECO
Ciegos Españoles CatOlicos es una asociación integradora dentro de nuestra iglesia, por ello no se excluye a las personas de sus comunidades o grupos de oración, si no que intentamos ayudar más a la integración en esos grupos.
Hacemos nuestras las palabras del Papa Benedicto XVI en la carta post sinodal Dei Verbum 71: ”En este contexto, quisiera también recordar que el Sínodo ha recomendado prestar una atención especial a los que, por su condición particular, tienen problemas para participar activamente en la liturgia, como, por ejemplo, los discapacitados en la vista y el oído. Animo a las comunidades cristianas a que, en la medida de lo posible, ayuden con instrumentos adecuados a los hermanos y hermanas que tienen esta dificultad, para que también ellos puedan tener un contacto vivo con la Palabra de Dios.”
CECO nace con vocación de servicio a las personas con discapacidad visual, así como a todos aquellos que precisen de nosotros, fundamentalmente a aquellos que viven solos, están hospitalizados sin compañía, a los que viven en residencias… Como dice la Biblia en Hebreos capítulo 13 versículo 16: «Y no os olvidéis de hacer el bien y de la ayuda mutua, porque de tales sacrificios se agrada Dios.»
Los objetivos de CECO están dentro del espíritu del Concilio Vaticano II
a) La promoción espiritual, moral, cultural, y material de las personas con
discapacidad visual.
b) La promoción de la participación de las personas con discapacidad visual en
la vida y en la misión de la Iglesia por el testimonio y la propagación del
Evangelio.
c) La creación o el desarrollo de comunidades diocesanas de personas con
discapacidad visual con la colaboración de los ordinarios del lugar,
asociaciones de personas con discapacidad visual y otras asociaciones afines a
CECO.
d) CECO mantendrá relaciones con otras asociaciones católicas de ciegos tanto
nacionales como internacionales.
Los medios de acción de CECO son reuniones, congresos, peregrinaciones,
sesiones, diversas publicaciones y todos los demás medios de acción apropiados.
Pero, no se queda solo en el territorio de la conferencia episcopal española,
por medio de su pertenencia a la federación internacional de asociaciones
católicas de ciegos, denominada FIDACA, participa en proyectos solidarios con
países donde las personas con discapacidad visual no tienen recursos.
Nos ofrecemos para que la ayuda no sea una simple asistencia social, sino una contribución al anuncio del Evangelio, un conocimiento confiado a la Iglesia, esposa que nace del costado traspasado de Cristo, del cual estamos celebrando permanentemente el Misterio Pascual.
CECO, no es ONCE, pero trabaja conjuntamente con la ONCE y con la iglesia católica tanto a nivel nacional con la Conferencia Episcopal Española como en el ámbito diocesano con cada obispo en su diócesis.
Nadie puede llegar a la existencia sin madre y en el abrirse de cada persona hay una mujer. Maria es la mujer, madre de Jesús y nuestra que alienta nuestro caminar, porque también fue peregrina, peregrina de la fe, buscadora de Dios, peregrina del servicio generoso.
En las subidas escarpadas y peligrosas, en los caminos pedregosos, sentir que tienen una madre que te acompaña, te cuida, te protege, es una experiencia maravillosa que nos da alas. Así es la Virgen Maria, nuestra Madre. Acompaña en silencio nuestro caminar, sostiene nuestra fatiga. como lo hizo con el Apóstol Santiago. Cansado de no encontrar eco a sus palabras, acogida a su misión, en el momento del “bajón”, Maria se le aparece en un pilar y ella se convertirá en la acompañante fiel y segura de su predicación y anuncio.
Lema: Peregrinos con María
LUZ EN EL CAMINO CON SANTA MARÍA DEL SILENCIO
Nuestra parroquia es una parroquia personal (las parroquias personales se diferencian de las geográficas en que no prestan servicio a las personas de un territorio concreto, sino a toda la Diócesis. Se crean fundamentalmente por razones de lengua y culturas diferentes). Nuestra parroquia ofrece servicio pastoral a unas 15.000 personas sordas y sordociegas repartidas por toda la diócesis de Madrid. Es una comunidad formada por personas sordas, sordociegas y oyentes.
Está atendida por dos sacerdotes (un sordo y un oyente), un diácono permanente y un grupo grande de colaboradores laicos y religiosos, sordos y oyentes, que entregan gran parte de su tiempo, cualidades, recursos materiales, etc. a la evangelización de las personas sordas. Todos ellos formamos la comunidad parroquial de Santa María del Silencio. Una comunidad integradora dentro de la Iglesia católica.
Ofrece los mismos servicios y actividades que cualquier otra parroquia: Celebración de todos los sacramentos, formación, actividad caritativa-social, momentos de oración, etc.
Todo ello adaptado a las necesidades específicas de las personas sordas y sordociegas (lengua de signos, adaptación de textos, medios visuales, intérpretes, etc.)
Desde esta parroquia se coordina toda la pastoral de personas sordas de la Diócesis de Madrid. Tanto el diácono como el sacerdote van también a otras parroquias a celebrar matrimonios, funerales y otras actividades pastorales.
Todo comenzó el año 1940 cuando los dos sacerdotes sordos que entonces había en Madrid y un grupo muy reducido de personas Sordas seglares, conocedoras de las necesidades espirituales y materiales de las personas Sordas de Madrid y de las dificultades que tenían para participar en las actividades religiosas y pastorales de sus parroquias y acceder a sus servicios, como el de Caritas, se pusieron en contacto con el delegado diocesano de Caritas. Poco después se puso en marcha el Servicio Diocesano de Caritas para personas Sordas en la misma sede central de Caritas de Madrid donde eran atendidos los casos de necesidad de las personas Sordas (desde asesoría jurídica hasta temas económicos, pasando por medicinas, atención a enfermos, trabajo...) y ayudas de todo tipo que, aprovechando los recursos de los distintos servicios de la citada central de Caritas se iban solucionando de forma satisfactoria.
Poco después, a petición de uno de los citados sacerdotes, se puso en marcha en Madrid el Centro Diocesano de Pastoral del Sordo, con sede en un pequeño local cedido por el párroco de la de Ntra. Sra. de los Ángeles donde se llevaron a cabo las primeras actividades para la preparación de distintos Sacramentos (Bautismo y Matrimonio principalmente).
Toda esta experiencia acumulada llevó a algunas personas sordas, mayoritariamente jóvenes, a plantear a uno de los sacerdotes sordos la oportunidad y necesidad de crear una parroquia para Sordos en Madrid. Planteado el tema ante el departamento correspondiente del Arzobispado y tras el oportuno expediente, finalizó con el Decreto de Erección de la MISIÓN PASTORAL, CON CURA DE ALMAS, SANTA MARÍA DEL SILENCIO, firmado por el Cardenal-Arzobispo de Madrid, D. Vicente Enrique y Tarancón, con fecha del 3 de Mayo de 1973.
Desde el 30 de noviembre de 2012, las personas sordas y sordociegas tenemos nuestra nueva parroquia en la calle Raimundo Fernández Villaverde, Madrid. Es un templo más grande y totalmente accesible para todas las personas con discapacidad. Además de utilizar lengua de signos y voz en todas las actividades, tiene bucle magnético en el templo para usuarios de implante coclear o audífonos, proyección de textos en las misas, plataforma salvaescaleras, baños adaptados para personas con movilidad reducida.Todos nosotros tenemos heridas de muchos tipos y para esas heridas necesitamos muchos tipos de tiritas. Necesitamos la tirita de la aceptación de nuestra historia y realidad, necesitamos la tirita de la comprensión de los demás,..
Pero la más importante de las “tiritas” es el Evangelio de Jesús. Es la palabra que nos salva y nos sana de verdad. El Evangelio es la buena noticia de Dios para cada uno, que nos alienta en el camino, nos refresca, nos ilumina, nos orienta.
La palabra de Jesús…es tirita y colirio y “betadine espiritual” para limpiar nuestras “raspones”, nuestras rozaduras interiores.
El peregrino escucha la palabra, tiene los oídos espabilados para percibir lo que Dios pide en cada momento, convencido que El tiene una palabra de Amor Para cada uno de nosotros.
Lema: “Habla que tu siervo escucha”
LUZ EN EL CAMINO CON LA PASTORAL DEL SORDO – GALICIA
Desde hace varios años las delegaciones de catequesis de las diócesis gallegas en colaboración con la pastoral del sordo realizan un trabajo de evangelización difundiendo la Palabra de Dios en Lenguaje de Signos.
La atención pastoral de personas con diferentes discapacidades es una realidad que se trabaja en toda España a través de indicaciones desde la Conferencia Episcopal Española y de cada diócesis en particular según las necesidades y recursos de cada una.
Como ha dicho el Arzobispo D. Julián Barrio con motivo del Día Internacional de la Discapacidad de 2019: “La Iglesia siempre se ha sentido muy cercana a estas personas de las que tanto aprendemos y cuya dignidad hemos de subrayar siempre. Cómo hemos de agradecer a las personas que cuidan a los más débiles, sobre todo en estas circunstancias de la pandemia, a quienes hemos de hacer visibles en la vida de cada día. Esta jornada busca sensibilizar a la opinión pública sobre la condición de estas personas, apoyando su dignidad, sus derechos y bienestar, y trabajando para integrarlas en la comunidad civil y eclesial no como meros sujetos pasivos sino activos. Sería una pena no contar con sus dones y posibilidades. La Doctrina social de la Iglesia considera que “la sociedad debe ayudar a las personas con discapacidad para que puedan desarrollar todos sus dones; esa es la base de las sociedades justas y solidarias”.
Para nosotros, igual que para los peregrinos que nos han precedido en épocas pasadas, este camino expresa un profundo espíritu de conversión. Un deseo de volver a Dios. Un camino de purificación y de penitencia, de renovación y de reconciliación.
Por esto, para todos nosotros, corno para los peregrinos que nos han precedido, es muy importante terminarlo con un encuentro con el Señor, a través de los sacramentos de la Penitencia y de la Eucaristía.
Discurso del Papa Juan Pablo II en la Vigilia del Monte del Gozo con motivo de la IV Jornada Mundial de la Juventud, 19 de Agosto de 1989).
Lema: Hacia atrás, solo para coger impulso.
LUZ EN EL CAMINO CON CATEQUISTAS “DISFERENTES”
En la Diócesis de Santiago de Compostela, se ha formado un grupo de personas que ayudan en la misión catequética de las parroquias con materiales, propuestas y formación en el trabajo con personas con diversas patologías y necesidades específicas. Os invitamos a visitar la página web de catequesis de Galicia, en el apartado de recursos y encontrareis materiales específicos para temas y celebraciones especiales del sacramento del perdón y la Eucaristía.
El peregrino, después de la experiencia del camino y de su estancia en Santiago, donde recibió las gracias jubilares, ha de volver a su tierra, a su casa, con exigencias renovadas para su vida cristiana. Cumplido su objetivo, el peregrino compostelano ha de volver. Le esperan sus responsabilidades cotidianas, su familia, su trabajo, sus amigos y toda la red de personas y tareas entre las que es hermano, hijo, esposo, vecino, compañero...
Vuelve con la mochila llena de experiencias, vivencias, aprendizajes, emociones, proyectos...un sin fin de regalos recibidos que llenaran su vida de luz, de serenidad y de buenos propósitos. El peregrino al terminar el camino EMPIEZA A CAMINAR de otro modo aleccionado por el bagaje de sentimientos experimentados..ya no sará la misma persona, porque siempre hay un antes y un después tras el camino. Quizá dejará de ser “caminante” y pasará a ser “PEREGRINO”.
Lema: Se hace camino al andar.
LUZ EN EL CAMINO CON EL BEATO LOLO
Lolo fue un joven de Acción Católica, Nació en Linares (Jaén. España) en 1920. A los 22 años una parálisis progresiva le sentó en un sillón de ruedas. Su inmovilidad fue total. Los últimos nueve años, también ciego. Pero Lolo fue un joven seglar, un cristiano que se tomó en serio el Evangelio, o como decía de él el Padre Martín Descalzo: “Se dedicaba a ser cristiano. Se dedicaba a creer”. Tan en serio se tomaba el Evangelio que un día el Hno. Robert de Taizé se acercó a su casa. Lo vio. Lo oyó hablar. Miró aquel cuerpecillo agarrotado. Tomó la pluma y escribió, en la pantalla de la lámpara que alumbraba desde el rincón la mesa donde Lolo trabajaba: “Lolo, sacramento del dolor”.
Lolo había sido un joven amante del deporte y de la naturaleza; alegre en sus travesuras infantiles y más alegre aún en sus juegos de juventud cuando comenzó a abrirse a la vida, a desear “devorar” apostólicamente el mundo.
En la A.C. aprendió a amar con locura a la Virgen Nuestra Señora. De ella escribirá bellísimas páginas llenas de ternura y filial amor a lo largo de sus 28 años de escritor y periodista inválido. En la A.C. curtió su fervor eucarístico que le marcó para toda la vida. Ahí quedan sus escritos sobre la fiesta del Corpus Christi, sobre el Jueves Santo o sobre el sacerdocio. Ya paralítico -desde el balcón de su casa, situada justamente enfrente de las puertas de la Parroquia de Santa María de Linares, donde él fue bautizado y donde ahora reposan sus restos mortales- desde el balcón hacía un alto en sus trabajos de escritor paralítico y decía: “Ahora –frente a frente con el Sagrario- voy a echar con Él un parrafillo”.
Este Lolo, inquieto y andariego, recibe la visita del dolor: “Aparentemente el dolor cambió mi destino de modo radical. Dejé las aulas, colgué mi título, fui reducido a la soledad y el silencio. El periodista que quise ser no ingresó en la Escuela; el pequeño apóstol que soñaba llegar a ser dejó de ir a los barrios; pero mi ideal y mi vocación los tengo ahora delante, con una plenitud que nunca pudiera soñar”. Así escribe en “Cartas con la señal de la Cruz”.
En su vida fue calando el valor del dolor como aceptación en paz y gozo de los planes de Dios. Entonces su vida de cada día, su contacto con las gentes, se convierte en alegría contagiosa. A los pies de la gruta de Lourdes, Lolo peregrino-enfermo, le dijo a la Señora: “Te ofrezco la alegría, la bendita alegría”. Y la Señora sembró y multiplicó en él la semilla de la alegría, del buen humor, que él trasmitía a quien se acercaba a su sillón de ruedas.
En Lolo creció una dimensión de su vida que fue hacer de lo extraordinario (que eran aquellos grandísimos dolores de su enfermedad; su médico le decía “eres el enfermo grave que goza de más buena salud”), hacer que aquello extraordinario pareciera “ordinario” por la normalidad rutinaria con que vivía sus circunstancias terribles. Lo extraordinario de Lolo es que aquella situación tan dura él la convirtió en “aparente” normalidad. ¡Como si fuera un hombre sano y fuerte!
Lolo, seglar, joven de Acción Católica, periodista y escritor cristiano, inválido total, y ciego, de profundo espíritu eucarístico y mariano, hijo amante de la Iglesia, alegre en el dolor, apóstol y consejero,... ¡Esa es su tarjeta de visita! El día 12 de junio de 2010, en Linares, fue declarado Beato, en nombre del Santo Padre, por el prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, Monseñor Ángelo Amato.